Verona es una ciudad de 256.120 habitantes, situada en el noreste de Italia, capital de la provincia del mismo nombre, una de las siete provincias de la región del Véneto. Es uno de los lugares más atractivos e interesantes de Italia. Cercana a los lugares de mayor interés turístico del norte de este país, es un dinámico centro de economía moderna.

Está rodeada por un meandro del río Adigio, a unos 30 kilómetros al este del Lago de Garda. La ciudad posee un aeropuerto internacional, vía ferroviaria y carretera, que facilita el acceso a su centro. En Verona se puede encontrar un interesante centro histórico, y a pocos metros el Castello Scaligero del siglo XIV, la casa de Julieta, la Arena, y el anfiteatro romano del siglo II.

Verona constituye un nudo geográfico importante. Ha sido siempre punto nodal de todos los sistemas de transporte terrestre y acuático del noroeste de Italia. En tiempos de los romanos era punto de encuentro de cuatro vías consulares: la vía Gallica, la vía Augusta, el Vicum Veronensium y la vía Postumia.

Esta ciudad tiene un origen muy antiguo: fue habitada a partir de la prehistoria por una población difícil de individuar: tal vez los etruscos, los paleovenetos o los gallos. A partir de esa fecha, todas las poblaciones que se alternaron en el control de la zona, siempre lo hicieron por la presencia del Río Adigio, que se consideraba como el mejor lugar para la creación de una instalación. El nombre de Verona podría tener diferentes orígenes: la hipótesis etrusca habla de un nombre de mujer (Vera), la francesa del nombre de una familia romana y la latina del término -ver, que significaba primavera. La más probable es la de la unión entre VE (palabra etrusca que indicaba las poblaciones vénetas), RO (término griego que significa fluir, para indicar el río que atraviesa la ciudad) y NA (prefijo etrusco que indica una ciudad): en conclusión Verona sería más o menos la ciudad véneta con el río.

Verona ha tenido relaciones con poblaciones y ciudades procedentes de toda Europa y con costumbres sociales y religiosas muy diferentes entre sí. Por ejemplo, el primer contacto con los romanos aconteció en el segundo siglo a.C. Con ellos, Verona tuvo una serie de relaciones de amistad y alianza. Esto porque los dos necesitaban combatir contra las poblaciones que llegaban a Italia para saquearla. En los siglos siguientes, Verona llegó a ser una ciudad Municipium en estrecho contacto con el Imperio Romano. Lo fue hasta el fin del mismo, cuando incluso fue controlada por el Imperio de Oriente, o sea los Bizantinos. Entre el IV siglo y el comienzo de la Edad Media, Verona fue conquistada, saqueada y controlada por varias poblaciones bárbaras procedentes del norte de Europa. Ellos la escogieron incluso como centro militar, de descanso y organización, debido al Río Adigio y a las tierras fértiles.

Los primeros dos siglos pos barbáricos se caracterizaron por el nacimiento de los municipios en todo el área que hoy corresponde a la Llanura Padana y Verona tuvo un papel fundamental en la creación de la Liga Veronesa, en la lucha contra Milán. En el siglo XIII hubo unas guerras entre las familias locales, las cercanías y los alemanes que al final conquistaron la ciudad. Entre 1405 y el siglo XVIII Verona empezó una relación política, comercial, de amistad y devoción con la ciudad de mayor relevancia histórica y económica del actual Véneto, Venecia. Hasta 1866, año en que Verona llegó a ser una ciudad del Reino de Italia, fue conquistada por Austria y luego por Francia (con Napoleón); su anexión a Italia aconteció sólo cinco años después de la proclamación del nuevo país. Ciudad italiana, Verona no tuvo un lugar de gran importancia durante la primiera Guerra Mundial. En cambio, en la segunda, por su ubicación estratégica, entre otro, cerca de la recién costituida República Social de Saló fue bombardeada y perjudicada. En esta área las numerosas organizaciones de soldados y gente común favorecieron la conclusión del conflicto.

Entre los museos, destacan el Arqueológico, el de Ciencias Naturales, de ferrocaril y de Palazzo Forti.

Verona se convirtió en un de los centros italianos de mayor importancia en el mundo, por la obra del escritor inglés William Shakeaspeare, Romeo y Julieta. Aunque no conociera la ciudad, aprendió todas las informaciones posibles leyendo obras de escritores italianos, contemporáneos suyos. La ciudad influenció mucho la visión literaria del autor que la puso en libros y cuentos de menor importancia pero de gran éxito.

La economía veronesa se basa en la crianza y en la producción de queso. El postre típico es el pandoro, conocido internacionalmente y comido en general en la cena de Noche Buena. Destaca una industria entre las más organizadas y eficientes del país. Se producen azeite, vino, arroz y manzanas.

 

* INFO. EUROPEANDO



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